Carlos Bertrand Orozco

Eulogy of Carlos Orozco

Carlos Bertrand Orozco (Husband, Father, Grandfather, Great grandfather and great-great grandfather) passed away on May 3 ,2024.  He died peacefully surrounded by his family.  He waited patiently for his last son to arrive, so as to say good bye to all who were able to be present for his last breaths.  He is survived by a large family consisting of his beloved wife Albertina; sons Douglas, Carlos, David, Walter and Gontran; daughters Orietta and Ana Erlinda, fifteen grandchildren, eight great grandchildren with three more on the way; and his brother Fulvio.

Carlos was born in Managua, Nicaragua on November 22, 1931, though his official Birth certificate stated Dec 2, 1931.  Carlos was born to a humble family that valued hard work and humility over everything.  He attended public school and got initiated into the workforce at the age of 11, cleaning graves in a graveyard.  He went on to become an Assistant Chief at the Justice Department, where he was admired and beloved by his peers and coworkers.  Pursuant to the change in leadership of the Government, he followed his family to the United States where he began a new chapter of his life.  Once again the resilient Carlos had to start at the bottom, with nothing … all wealth, title and status having been left behind.  He took no shame in doing anything it took to support his family.  Any job that helped in comforting and providing for his family’s needs was good enough for him. He continued as long as his body and health allowed.

His biggest hobbies were gardening and expanding the flowerbeds in his backyard, teasing his children and grandchildren, and let’s not forget the scratching of the lottery tickets that seemed to come in endless abundance upon his request!

His friends and family will miss his tremendous kindness and generosity.  His word of wisdom and the calmness within him no matter what crisis hit.  He was able to make everyone feel loved and important.  He never complained about anything!  Not his health, not his pains, not his aches!  He always expressed his appreciation for all the blessings he’d had, and the gratefulness to be able to spend another day with his beloved wife Albertina and his children.  He maintained that demeanor to the last breath he took on May 3rd.

He will be missed greatly by all that had the blessing of crossing his path.  May his soul rest in peace and guide his loved ones for ever.

Elogio a Carlos Orozco

Carlos Bertrand Orozco (Esposo, Padre, Abuelo, Bisabuelo y tatarabuelo) falleció el 3 de mayo de 2024. Murió pacíficamente rodeado de su familia. Esperó pacientemente la llegada de su último hijo, para despedirse de todos los que pudieron estar presentes en su último aliento. Le sobrevive una gran familia formada por su amada esposa Albertina; hijos Douglas, Carlos, David, Walter y Gontran; hijas Orietta y Ana Erlinda, quince nietos, ocho bisnietos y tres más en camino; y su hermano Fulvio.

Carlos nació en Managua, Nicaragua el 22 de noviembre de 1931, aunque su certificado de nacimiento oficial indica el 2 de diciembre de 1931. Carlos nació en una familia humilde que valoraba el trabajo duro y la humildad por encima de todo. Asistió a una escuela pública y se inició en el mundo laboral a los 11 años, limpiando tumbas en un cementerio. Llegó a ser subjefe del Departamento de Justicia, donde sus compañeros y compañeros de trabajo lo admiraban y amaban. Tras el cambio de dirección del Gobierno, siguió a su familia a Estados Unidos donde inició un nuevo capítulo de su vida. Una vez más, el resistente Carlos tuvo que empezar desde abajo, sin nada... toda la riqueza, los títulos y el estatus quedaron atrás. No se avergonzaba de hacer todo lo necesario para mantener a su familia. Cualquier trabajo que ayudara a consolar y satisfacer las necesidades de su familia era suficiente para él. Continuó mientras su cuerpo y su salud se lo permitieron.

Sus mayores pasatiempos eran la jardinería y ampliar los macizos de flores de su patio trasero, bromear con sus hijos y nietos, era muy humorista¡ y no olvidemos raspar los billetes de lotería que parecían llegar en abundancia sin fin a petición suya!

Sus amigos y familiares extrañarán su tremenda amabilidad y generosidad. Su palabra de sabiduría y la calma dentro de él sin importar la crisis que lo golpee. Pudo hacer que todos se sintieran amados e importantes. ¡Nunca se quejó de nada! ¡Ni su salud, ni sus dolores! siempre expresó su agradecimiento por todas las bendiciones que había tenido y el agradecimiento de poder pasar un día más con su amada esposa Albertina y sus hijos. Mantuvo esa conducta hasta el último aliento que tomó el 3 de mayo.

Lo extrañaremos mucho todos los que tuvieron la bendición de cruzarse en su camino. Que su alma descanse en paz y guíe a sus seres queridos para siempre.